Aún tengo las manos manchadas de sangre, de intentar retenerte sin poder evitar que te fueras...Siento haberte herido pero es tan profundo este sentiemiento como cien flechas clavadas en un corazón inmortal, inmortal después de tenerte tan cerca y ahora, sin embargo tan lejos, tanto que no sé si te podré volver a tocar, tanto que no sé a ciencia cierta si tus labios me volverán a besar, pero lo que si tengo claro es que...corazón nunca te podré olvidar.
Nos separan kilómetros al igual que los que nos separaban cuando yo me enamoré de ti, mirando tu sonrisa. Estoy soñando que esa distacia se convirtiera en escasos kilómetros y que entre nosotros no corriera un ápice de aire, que el cielo y las estrellas nos envidiaran por que nosotros estuvieramos mas unidos que ellos, que el universo dara un giro de 360º y nosotros fueramos inmunes al cambio, en fin mejor seguir soñando...

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